lunes, 20 de junio de 2011

Ana Frank no puede ver la luna

Hoy, Ana Frank cumpliría ochenta años,

¿cómo será ese sueño hondo
de cumplir y cumplir
ochenta años?

quién puede bajarse
del tren de la vida y mirar caminos
ochenta años

ochenta, ahora tendidos
en el viejo árbol de la muerte,

ochenta años

yo miraré por ti los fresnos,
apagaré las velas,
celebraré la luna,
besaré a mi mujer,
este es mi regalo:
felicidades.




*En realidad, hoy Ana Frank cumpliría 82 años*

domingo, 12 de junio de 2011

Querida yo a los 16 años

No lo hagas. No te rindas. Sé que no quieres morir, pero sientes que la vida no vale la pena. Tranquila. Apenas estás aprendiendo a vivir, y la vida es larga. Lo único que realmente vas a tener es tiempo. Y aunque hoy no puedas ver sentido o dirección algunos, el tiempo pasará igual, y todo será mucho más claro conforme vivas. No te prometo que será más fácil. Pero te prometo que aprenderás a crear tu vida en el día a día. Y vas a estar muy orgullosa de la mujer en la que te vas a convertir.

El mundo te parece oscuro, ajeno y feo, pero te prometo que un día, dentro de no muchos años, eso va a pasar, porque todo pasa. Tienes buenos amigos que te ayudarán a ver la vida de una forma distinta. Apóyate en ellos, que aunque no te entienden, te quieren. A algunos los vas a volver a ver; otros se irán para siempre de tu vida; pero a otros los seguirás teniendo en tu vida por muchos, muchos años. Cuídalos. Los amigos son un espejo que nos permite ver dimensiones de nosotros que a veces no sospechamos. Y aunque hoy te muestras huraña y te aíslas, un día te darás la oportunidad de abrirle el corazón a mucha gente. Habrá quien te quiera bien, habrá gente que te defraude, pero siempre, siempre te van a enseñar algo. Aprende la lección y sigue tu camino.

El amor te parece inmerecido. Te tengo noticias: siempre nos parece que es así, no importa la edad que tengamos. Sobre todo porque siempre es sorpresivo. A veces no lo esperas y aparece, inoportuno. Y aunque en este momento piensas que no lo encontrarás nunca, créeme: te va a llegar en el momento menos pensado. Y vas a ser muy feliz. Y, también, te va a doler. Pero no te preocupes: el dolor nos hace valorar lo bueno. Con el tiempo, aprenderás que sufrir no es obligatorio, y podrás ser capaz de agradecer el dolor que pase por tu vida.

Así que no te preocupes. A ese chico por el que suspiras y al que le escribes poemas de amor, y que nunca te va a hacer caso, no le llores (tanto). Te van a romper el corazón otras veces, y eso es bueno por al menos dos razones: cada vez aprendes más de ti, lo cual es bueno porque sólo tú vas a acompañarte toda la vida; y en segundo lugar, siempre, siempre volvemos a amar, lo cual es bueno porque aprendemos a hacerlo mejor. Dentro de unos años mirarás atrás, hacia los desencuentros, hacia el desengaño, y te dará mucha risa las veces que pensaste que la vida se acababa con el desamor. No se acaba.

Sé que te sientes inadecuada, fea y sin chiste, y que quieres cambiar. Si quieres teñirte el cabello, adelante. Pero en unos años el color natural de tu pelo castaño rojizo será la envidia de mucha gente. Y sí, aunque hoy te sientes fea y poco atractiva, te prometo que en algunos años realmente apreciarás tu belleza. Y sobre todo aprenderás que ser sexy es más una cuestión de actitud que de estética. Y, créeme, caminarás por la calle con la frente en alto sabiéndote una mujer muy sexy.

Sé que no soportas a tus padres. Con el tiempo, eso también pasará. Seguirán teniendo ideas muy distintas a las tuyas, y aunque a veces seguirán desesperándote, aprenderás a escucharlos. Y aprenderán, todos, a escucharse sin hacerse caso. Cuida a tu padre, que a veces es duro y frío pero te quiere, de veras. Cuida a tu madre, que nunca dejará de ser tu mejor amiga. Y acércate a tus hermanos muy temprano en la vida: son los únicos seres humanos a los que de verdad conoces desde que nacieron, y es lindo contar con ellos en los momentos más difíciles. También es lindo saber que ellos cuentan contigo.

Finalmente, ten en mente que tienes 16 años. No tienes que tener todas las respuestas. Ya te llevo media vida de distancia y tampoco lo tengo todo claro. Y espero que cuando vuelva a escribirte, a tus 31, desde los cuarenta y algo, pueda decirte todavía: todo pasa. Así que lo que pase, sea lo que sea, disfrútalo mucho. Ser feliz sólo es cuestión de querer.

Nadia

sábado, 4 de junio de 2011

Adiós Mi Amor, adiós

El fuego arrasa mi cuerpo con el dolor de amarte.
El dolor arrasa mi cuerpo con el fuego de amarte.
El dolor como una herida a punto de estallar de amor por ti.
Consumido por el fuego de mi amor por ti.
Recuerdo tus palabras.
Pienso ahora en tu amor por mí.
Me desgarro por tu amor por mí.
Dolor y más dolor.
¿Adónde te vas con mi amor?
Me dicen que te marchas.
Me dicen que me dejarás aquí.
Mi cuerpo se entumece de pena.
Recuerda lo que dije, Mi Amor.
Adiós Mi Amor, adiós.



(Traducción libre de Nadia L. Orozco)