Entre Edward Norton y Eric Bana, siempre elegiría al príncipe troyano, pero sin duda el guapo ilusionista le dio un cariz espectacular al Increíble Hulk, haciendo de esta cinta un éxito de taquilla, en contraste con la versión de 2003 que dejó mucho que desear.
No sólo la historia es sorprendete, la química entre Norton y Liv Tyler fue excelente, así como la actuación de William Hurt. En efectos especiales y manejo de cámaras fue fenomenal. Y sin duda la aparición de Tony Stark, personificado por otro actorazo que más temprano este año sorprendió con su interpretación en Iron Man, promete una secuela que dará batalla al projecto de DC Comics de traer a la vida a la Liga de la Justicia.
Cinco palomitas.
Hace 8 años.