Yo no era ni proyecto, pero el amado George Lucas era un chamaco que recién salía de la prepa en Modesto, California, y sin duda la energía del rock and roll, las chicas y los autos fueron la inspiración que diez años más tarde dieron vida a American Graffiti, una de las primeras cintas de este genial escritor y director, en mancuerna con su amigo y productor Francis Ford Coppola.
La historia es de dos chicos recién salidos de la prepa, que pasan una última noche de aventuras junto a sus amigos en su pueblo natal, antes de partir a la universidad. Lo genial de esta cinta es, desde luego, los autos, y también el debut en cine de Richard Dreyfuss y Harrison Ford.
Genial, en especial el soundtrack, chequen nada más:
Cuatro palomitas.
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